Hemos comenzado el nuevo año con muchísima actividad. La primera sorpresa fue el día de Reyes, aparecieron en casa dos cachorros abandonados. Aun están con nosotros, en espera de ser adoptados por alguna familia. Son preciosos, si no fuera porque ya tenemos cinco, nos los quedaríamos.La huerta está preciosa, con una gran variedad de hortalizas sembradas y las papas, a punto de sembrarse.Los alrededores de la casa, empiezan a tomar forma, se ha estado plantando diversas palmeras e incluso un drago.Todo ello, acompañado de mi colección particular de preciosos troncos recogidos en medio del campo, es sorprendente las formas que pueden llegar a adquirir con el paso del tiempo.
Nuestra querida pava, lleva unos días incubando, esperamos tener esta vez más suerte, ya que estas navidades han fallecido algunos de los pavitos que teníamos (moquillo).La camada de pollos nuevos, "el grupito de los siete", están preciosos, cada vez controlan mas y ya tienen el territorio dominado. Lo único que nos falta es un poco de agua caída del cielo, pero parecese que en estos días la tendremos.
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