Este año las lluvias han permitido que tengamos una buena temporada de tagarninas, tiernas y de un tamaño considerable. Cogerlas es todo un placer, andando ladera arriba ladera abajo, aunque al limpiarlas más de una espina se te clave. Es una planta muy agradecida y sobre todo muy superviviente, permitiendo que en estos tiempos muchas familias puedan pasar mejor el mes, vendiéndolas en cualquier esquina de un supermercado.
Solemos degustarlas, en nuestras tortillas de papas, en revueltos, y sobre todo, en un delicioso potaje de garbanzos, con su correspondiente "pringá". En estos días de fríos, es importante meter calorías al cuerpo, para poder entrar en calor. A continuación os detallamos la elaboración del potajito.
En una olla a presión echamos medio kilo de garbanzo que la noche anterior fueron puestos en remojo. Le añadimos un buen trozo de carne de ternera (jarrete), un pedazo de tocino, un vaso de aceite (200ml.), una cucharadita bien colmada de pimentón, dos o tres papas peladas y partidas en tacos, los dientes pelados de una cabeza de ajo, un buen manojo de tagarninas limpias y troceadas, sal al gusto y se cubre de agua. Se pone a calentar y cuando empiece a hervir se tapa. En el momento que la válvula comience a dar vueltas se le deja media hora. Una vez listo, cuando se la haya ido la presión, se destapa la olla y se le puede echar el chorizo y la morcilla y se tiene otros 10 minutos en el fuego pero ya sin tapar.
Aprovisiónese de una buena telera de pan de campo y a disfrutar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario