Que mejor despedida, que el "agua bendita" que ha caído este fin de semana. El medidor marcaba alrededor de los 30 litros, litros que refrescaran la tierra y nos dará una pequeña tregua. Abril nos deja con cierta esperanza, de que nuestras papas engorden un poquito en su recta final. Se respira otro aire, fresco y limpio. Los animales se les ve con otro ánimo y muy activos. El mes de mayo promete en un estallido de colores y olores.
En los instantes que despejaba un poco, se producía una actividad frenética de los insectos, invadiendo todo a su paso, es increíble cuanta diversidad! .
Como resultado final de estos días, un cielo totalmente despejado y el olor a tierra mojada.....